¿La Coccidiosis Subclínica afecta a la pigmentación de los pollos de engorde?
En la producción de pollos para carne, se ha dicho en reiteradas oportunidades que la Coccidiosis Subclínica afecta los parámetros productivos, entendiéndose por ellos al consumo de alimento, la ganancia de peso, la mortalidad y al índice de conversión alimenticia (ICA). Muchas veces estos valores son reunidos, o mejor dicho resumidos en algunos índices que los engloban, con el fin de contemplarlos a todos y establecer, más fehacientemente, el real resultado de una crianza o de la marcha de una explotación, a lo largo del tiempo a través de comparaciones cronológicas. Entre estos índices los más conocidos son el Factor de Eficiencia Productiva (FEP) también llamado Índice de Eficiencia Europeo. Se puede agregar asimismo la relación del peso en función de la conversión (P/C) o la Conversión Ajustada a un determinado peso.
Sin embargo existen otros parámetros que son importantes, y que tienen que ver con la calidad del producto final. En ellos podemos citar también el rendimiento de pechuga, la relación grasa abdominal/peso de pechuga y la calidad de garras entre otros. Pero, sin dudas existe un parámetro que en muchos países tiene una importancia fundamental, ya que no solo es indicador de la salud de los animales sino que también tiene estrecha relación con la calidad organoléptica del producto final y, que como tal, es de vital importancia en el precio final pues tiene que ver con el gusto y preferencia del consumidor. Nos referimos específicamente a la pigmentación en especial de la piel del pollo al final de su crianza.
Los primeros trabajos realizados para determinar el grado de deterioro de la coccidiosis sobre la pigmentación de los pollos datan de la década de los años 1970. Varios autores y con diferentes metodologías determinaron que la coccidiosis clínica y aún la subclínica es responsable de pérdidas, tanto en los valores plasmáticos de carotenoides, como en el escore de pigmentación de la piel de los pollos. Tales deterioros, obviamente se ven acompañados por disminución en todos los parámetros productivos de los animales. En una investigación más reciente Frade y col. (2013) observaron que, en animales infectados con coccidios, la absorción de carotenoides se redujo por descamación y acortamiento de las vellosidades de la mucosa intestinal, y una disminución continua de carotenoides plasmáticos por pérdida de sangre, derivada de hemorragias en la mucosa cecal.
En Latinoamérica una prueba con aves en floor pen llevada a cabo por Mattiello, R (1998) de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Buenos Aires, ante la inoculación experimental de Eimeria acervulina y E. maxima por separado y, de ambas especies en conjunto aisladas en terreno, encontró a los 21 días de vida en el grupo control (sin desafío) un nivel de carotenoides plasmáticos significativamente menor, en un valor de 11,2% en el grupo con ambas eimerias. Por su parte en los lotes donde se inoculó solo una de las dos especies, la diferencia fue mayor en aquél desafiado con E. maxima solamente. Junto con la disminución de estos valores también se vieron afectados las proteínas y los lípidos plasmáticos.
En México, en un trabajo más reciente llevado a cabo por Sánchez Hernández y col. se demostro que el desafio con cepas de Eimeria redujo linealmente (p = 0.019) un parámetro relacionado con la pigmentación amarilla de la piel.
Finalmente podemos agregar que en ciencia hay verdades que parecen obvias y que por lo tanto no debieran necesitar su demostración. Este podría ser el caso de la falta de pigmentación producida por la coccidiosis, sin embargo siempre es imprescindible ratificarlas a través del método científico. Esta aseveración es particularmente evidente en la coccidiosis subclínica que, como se dijo, pocas veces se detecta aunque en las explotaciones actuales, donde los que parecen ser pequeños números pueden transformarse en grandes pérdidas económicas, será necesario tenerlas en cuanta
Estas razones hacen que no deban descuidarse las presentaciones leves de la coccidiosis tanto a través del monitoreo rutinario como en su tratamiento y prevención.
Dr Mauricio E. De Franceschi
Profesor Emérito
Director Especialización en Producción Avícola
Universidad Nacional de Luján
Buenos Aires, Argentina
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